Desde el 26 de septiembre y hasta la mañana del 29 de septiembre, Día Mundial del Corazón, los diputados que acudieron al Congreso participaron en una actividad muy diferente, orientada a impulsar la prevención de la salud cardiovascular. Un equipo de profesionales médicos les realizo un chequeo para evaluar sus riesgos cardíacos.
De esta forma expresaban su compromiso con la lucha contra la enfermedad causante de 120.000 fallecimientos anuales en España y recordaban a los ciudadanos la necesidad de cuidarse y hacerse chequeos periódicos. Los resultados demostraron la importancia de la situación. Entre las 279 personas, con 49,6 años de media, el 47% de los hombres y el 28% de las mujeres tenían un riesgo de moderado a alto de sufrir un evento cardiovascular. Muchos se sorprendieron.
Una jornada por la educación y la prevención secundaria
A este desconocimiento sobre el estado de salud cardiovascular hizo referencia el doctor Julián Pérez-Villacastín, presidente de la Sociedad Española de Cardiología, en la conferencia magistral que abría la jornada sobre salud cardiovascular el Congreso. “Por eso presentamos la campaña Pactos por tu corazón, con la queremos alertar a la ciudadanía sobre los factores de riesgo de las patologías cardiovasculares. Cada letra por un riesgo. La P de presión arterial, la A de alimentación, la C de colesterol y contaminación, la T de tabaco, la O de obesidad, y la S de salud mental, relacionada con el sedentarismo y la obesidad. La enfermedad cardiovascular puede prevenirse en un 80% de los casos con hábitos saludables ”.
Un plan por la prevención cardiovascular
Organizada por la Sociedad Española de Cardiología (SEC) y la Fundación Española del Corazón (FEC), con la colaboración de Novartis e impulsada por la Comisión de Sanidad y Consumo del Congreso, la jornada fue inaugurada por Gloria Elizo, vicepresidenta tercera del Congreso de los diputados, y por Jesús Ponce, presidente de Novartis España.
Jesus Ponce, presidente de Novartis: “Es una enfermedad invisibilizada y debemos unirnos contra ella”
En su intervención, Jesús Ponce recordó que en España cada 4 minutos fallece una persona por causas cardiovasculares. “Estamos antes un reto mayúsculo, un problema de salud pública. Es una enfermedad que está invisibilizada y trivializada – que puede suponer en coste hasta el 0,7% del PIB – y por eso estamos aquí”.
También recordó la importancia de la prevención y de atender al colectivo que ha sufrido ya un evento, porque estas personas triplican su riesgo y alrededor del 25% tiene un segundo evento al cabo de unos años.
“No podemos luchar solos, tenemos que unirnos y colaborar todos. En España somos unos privilegiados porque somos el único país de la Unión Europea que tiene una Estrategia Nacional de Salud Cardiovascular y ahora llega el momento de la acción”.
Prevención de la salud cardiovascular y la desigualdad
La sesión continuó con la mesa redonda, Enfermedad cardiovascular y desigualdad, moderada por Natividad Calvente, directora de Asuntos Corporativos de Novartis, que empezó proponiendo situar al paciente en el centro del abordaje de la enfermedad.
En la mesa se planteó la posible banalización del colesterol, a lo que Maite San Saturnino, presidenta de Corazón Sin Fronteras y de Cardioalianza, afirmó que “tenemos que ser conscientes de su gravedad desde edades tempranas y hablar más del colesterol porque no se sabe lo importante que es controlarlo para evitar riesgos y que se repitan los accidentes cardiovasculares”.
En relación a la prevención, el doctor Andrés Iñiguez Romo, presidente de la Fundación Española del Corazón, puso el acento en educar en hábitos saludables desde la infancia. “En un estudio a niños entre 1 a 15 años se vio que muchos seguían una dieta de mala calidad, el 35 % tenían dos factores de riesgo, el 20% sobrepeso y, muy grave, la familia no era consciente de la mala alimentación que seguían sus hijos”. El doctor pidió comunicar más y divulgar más para prescribir la buena salud.
José María Mostaza, presidente de la SEA: “el paciente debe hacerse responsable de la prevención de su salud cardiovascular”
Raquel Martínez, secretaria general del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, defendió el papel del sector en el acompañamiento de los pacientes y en la ayuda que prestan para detectar cuando hay problemas en el seguimiento de los tratamientos. También anunció una nueva herramienta digital que puede ayudar a los pacientes a controlar indicadores, recordar revisiones y el horario de toma de los fármacos que indica su tratamiento.
El doctor Juan Carlos Obaya, coordinador del grupo Enfermedades Cardiovasculares de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SemFYC), compartió que era necesario crear un triángulo entre la atención primaria -que es la puerta de entrada en el sistema de salud-, los especialistas y el propio paciente para que utilizando todas las herramientas de las que disponen logren atajar este problema de salud pública. “Si fallamos en la prevención -dijo- fallamos en el abordaje de la enfermedad cardiovascular”.
Natividad Calvente, directora de asuntos corporativos de Novartis España: “La prevención secundaria es importante para evitar segundos eventos cardiovasculares”
Fue muy interesante la intervención de José María Mostaza, presidente de la Sociedad Española de Ateroscerosis (SEA), que insistió en la importancia de “animar a los ciudadanos a cuidarse. Debemos enseñarles a hacerse responsables de su salud”. También recordó la difícil situación que pasan los médicos de Atención Primaria y lo fundamentales que son en la educación y prevención de la enfermedad.
En el cierre de la mesa redonda Natividad Calvente, recordó lo importante que es “insistir en la prevención secundaria para que los pacientes disminuyan su riesgo de un segundo evento” y pidió a los participantes que expresaran una petición que pudiera ayudar en el reto cardiovascular.
Maite San Saturnino pidió más visibilidad de la enfermedad y el doctor Andrés Iñiguez Romo que se invirtiera al menos el mismo presupuesto en campañas de salud cardiovascular que el que se dedica a frenar los accidentes de tráfico. “En fallecimientos, la enfermedad cardiovascular es un 120% más grave”.
Juan Carlos Obaya pidió que la Estrategia Nacional Cardiovascular “no cayera en saco roto, porque es completa, con estrategias de prevención de salud cardiovascular, de rehabilitación e incluyendo cuestiones de género”.
Mueren más mujeres que hombres
A continuación, Rosa María Romero, presidenta de la Comisión de Sanidad y Consumo del Congreso de los Diputados, moderó la mesa redonda, Liderazgo de España en Europa frente a las enfermedades cardiovasculares, en la que representantes de los distintos grupos políticos debatieron sobre la necesidad de trabajar juntos en la prevención de la salud cardiovascular.
“En Europa hay 60 millones de enfermos cardiovasculares -dijo Romero – y cada año hay 2 millones de muertos por un evento del corazón. Me gustaría que reflexionáramos sobre varias cuestiones: ¿necesita la Unión Europea un plan europeo cardiovascular como el que existe contra el cáncer?, y ¿cómo podemos reducir la brecha de salud que hay en Europa y en nuestro país?”.
Ana Prieto, portavoz del PSOE en la Comisión de Sanidad y Consumo, recordó que el años pasado hubo más fallecimientos de mujeres, 9.000 casos, que hombres y que se estaba fallando en la batalla por bajar el número de infartos e ictus. “Lo primero es admitir el problema, para luego poder trabajar juntos”.
Sobre la prevención de la salud cardiovascular, Elvira Velasco, portavoz del PP, puso el acento en la necesidad de realizar “un abordaje multidisciplinar de la enfermedad para reducir los casos y dotar a los servicios sanitarios de los recursos que necesitan”. Los representantes del Vox y Ciudadanos expresaron igualmente su compromiso en la lucha contra la enfermedad cardiovascular.
Hector Bueno, cardiólogo: “Con la nueva Estrategia Nacional de Salud Cardiovascular España tiene una oportunidad para liderar en Europa la lucha contra esta enfermedad”
Tras esta mesa redonda intervino el doctor Héctor Bueno, coordinador científico de la Estrategia Nacional de Salud Cardiovascular, que explicó que “la nueva estrategia es una gran herramienta para reducir las inequidades en el acceso a la salud, bajar la incidencia y la prevalencia de la enfermedad y hacer promoción de la salud”.
También explicó que este trabajo plantea cambios importantes en la forma de abordar la problemática, en el sentido de que “ya no queremos hablar de enfermedad cardiovascular porque significa que llegamos tarde. Hay que ir a los colegios, a las familias, a los ciudadanos; en definitiva, llegar antes para que no lleguen a ser pacientes. La nueva Estrategia Nacional de Salud Cardiovascular tiene además una visión multidisciplinar desde el principio. Se ha contado con cardiólogos, médicos de atención primaria, profesionales de enfermería, gestores y por supuesto pacientes”.
Con la colaboración de todos, la estrategia recoge líneas de trabajo fundamentales, como son la prevención, el empoderamiento del paciente, la gestión del conocimiento, la equidad y la atención integral.
Héctor Bueno, que es cardiólogo del Hospital Universitario 12 de Octubre y en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), también expresó su deseo de que España aproveche “la presidencia de la Unión Europea en 2023, coja la bandera de la estrategia nacional para liderar la lucha contra la incidencia y la prevalencia de la enfermedad cardiovascular”.